Antigena Email utiliza la inteligencia artificial especializada de Darktrace para detener las amenazas de correo electrónico más avanzadas, interviniendo para proteger a los empleados contra toda la gama de amenazas dirigidas a la bandeja de entrada.
En lugar de basarse en reglas estáticas y datos históricos, la tecnología trabaja comprendiendo los ‘patrones de vida’ únicos de los usuarios del correo electrónico y la compleja red de relaciones entre ellos. Este enfoque basado en el autoaprendizaje permite a Antigena Email revelar qué mensajes de correo electrónico, benignos en apariencia, son indudablemente maliciosos.
El 94% de las ciberamenazas comienzan con un mensaje de correo electrónico.